La Fundación para los Intercambios del Estrecho (SEF, siglas en inglés) de Taipéi está dispuesta a invitar al jefe de la Asociación para las Relaciones a través del Estrecho de Taiwán (ARATS, siglas en inglés) de Beijing a visitar Taiwán, ya que este año marca un hito para las dos organizaciones, dijo una vocera de la SEF el miércoles 17.
Si bien los diálogos entre los dos lados del Estrecho de Taiwán han sido suspendidos desde que la presidenta Tsai Ing-wen asumió su cargo en mayo del 2016, la SEF aún se mantiene abierta a los intercambios con la ARATS, señaló la subsecretaria general de la SEF, Kuan An-lu, en una rueda de prensa.
"Por ello, la SEF desea que el presidente de la ARATS, Zhang Zhijun, pueda visitar Taiwán este año, que coincide con el 20º aniversario de la histórica conferencia sostenida por el entonces presidente de la SEF, Koo Chen-fu, y el entonces presidente de la ARATS, Wang Daohan, en Shanghái en 1998", dijo Kuan, añadiendo que de ser posible, la actual presidenta de la SEF, Chang Hsiao-yueh, no descartaría visitar China.
La SEF y la ARATS son dos organizaciones intermediarias fundadas en 1990 para manejar los asuntos relacionados con el Estrecho de Taiwán a falta de relaciones formales entre ambas partes.
En el mes de octubre del año 1998, Koo y Wang se reunieron en Shanghái y decidieron reanudar los diálogos entre los dos lados con respecto a los asuntos políticos y económicos.
Koo y Wang se reunieron por primera vez en Singapur en 1993 con motivo de la primera reunión directa del Estrecho tras el año 1949, cuando el Gobierno de la República de China se trasladó de China a Taiwán tras la guerra civil.
No obstante, las reuniones del Estrecho fueron suspendidas unilateralmente por Beijing en 1995 para protestar contra la visita realizada por el entonces presidente de Taiwán, Lee Teng-hui, a Estados Unidos.
Y ahora está pasando lo mismo pasa después de que la presidenta Tsai, del gobernante Partido Democrático Progresista en pro de la independencia, llegara al Palacio Presidencial en mayo del 2016 adoptando una política menos conciliatoria hacia China.
En tal sentido, Kuan puntualizó que sin embargo, la SEF había estado manteniendo sus operaciones institucionales, y que el mecanismo de comunicación entre los dos lados aún seguía abierto, pese a que la suspensión unilateral por parte de Beijing en los diálogos del Estrecho había suscitando una serie de problemas en los intercambios entre los pueblos de ambas partes.
Por último, Kuan instó una vez más a Beijing a no permitir que los factores políticos obstaculizaran los intercambios del Estrecho.