¡Dejen a Taiwán ayudar en la lucha contra el cambio climático!
Embajador Armando Cheng, Representante de Taiwán en México
El pasado 11 de noviembre dio inicio la Conferencia de las Partes de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP29) en Bakú, Azerbaiyán, y de manera paralela la Organización Meteorológica Mundial publicó su reporte “Estado del Clima 2024” señalando que el 2024 se está convirtiendo en el año más cálido de la historia, toda vez que de enero a septiembre la temperatura media mundial del aire en la superficie fue 1.54°C superior a la media preindustrial. Ante lo anterior, el Secretario General de la ONU, António Guterres declaró que “la catástrofe climática está golpeando la salud, profundizando las desigualdades, obstaculizando el desarrollo sostenible y sacudiendo los cimientos de la paz”. El mundo se está enfrentando a la inminente amenaza del colapso climático, y es por eso que hoy más que nunca es de vital importancia que todas las naciones sean miembros responsables de la comunidad internacional y colaboren de manera proactiva para revertir los efectos negativos del cambio climático.
En coherencia y compromiso con los esfuerzos de la COP29, Taiwán continúa trabajando con sus sectores públicos y privados, aliados diplomáticos y otros países con ideas afines para promover acciones climáticas concretas. En junio de este mismo año, el presidente Lai Ching-te creó el Comité Nacional de Respuesta al Cambio Climático que tiene como propósito desarrollar activamente energías renovables y establecer una plataforma en la materia de información compartida y veraz, de manera que se formulen estrategias concretas para que Taiwán continúe combatiendo el cambio climático.
Asimismo, sabemos que el fortalecimiento de los marcos legales es esencial para establecer un frente contundente ante la emergencia climática, por lo que tras la aprobación de la “Ley de Respuesta al Cambio Climático” el año pasado, nuestro Ministerio de Medio Ambiente promulgó tres medidas que marcaron la entrada de Taiwán en la era del precio de las emisiones:
- Regulaciones que rigen la Recaudación de Tarifas de Carbono
- Regulaciones para la Administración de Planes de Reducción Voluntaria
- Metas de Reducción de Gases de Efecto Invernadero para Entidades sujetas a Tarifas de Carbono
De esta manera, el sistema de tarifas alentará a las empresas taiwanesas a realizar una transición efectiva a operaciones con bajas emisiones de carbono, y contribuyendo de manera eficiente al objetivo de Taiwán de alcanzar las cero emisiones para 2050.
En cuanto a cooperación internacional, Taiwán tiene planeado intensificar la cooperación internacional con nuestros aliados diplomáticos en cuestión de créditos de carbono, alineándose a lo estipulado en el artículo 6 del Acuerdo de París, así como con nuestra política de diplomacia integrada. De igual manera, en los últimos años Taiwán ha celebrado numerosos talleres en Marco Global de Cooperación y Capacitación (GCTF, por sus siglas en inglés) en coordinación con Estados Unidos, Japón, Australia y otros socios afines en materias como adaptación climática, transición energética, finanzas verdes y economía circular.
Como se puede observar, Taiwán tiene plena disposición para contribuir como un socio confiable en la lucha contra el cambio climático, incluso su espíritu fue reconocido en la resolución aprobada por la 52a Asamblea General de la Unión de Parlamentarios de Asia y el Pacífico, que apoyó la participación de Taiwán en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. No obstante, mi país es alienado de este mismo mecanismo de colaboración por razones políticas, y aún así, no escapa de su responsabilidad global; al contrario, usamos nuestras fortalezas como una economía importante con un alto desarrollo tecnológico, con amplias capacidades en energías renovables e innovación para bajas emisiones de carbono, que son los motores cruciales de la acción climática global, para contribuir con esta lucha.
Por todo lo anterior, todas las naciones del mundo deben darse cuenta del gran aliado que es Taiwán, y ¡nos deben dejar ayudar! Nuestras generaciones futuras merecen un mundo sostenible, trabajemos juntos para lograrlo hoy.
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